La retinopatía diabética
afecta a los ojos y es una derivación de la diabetes. Está causada por la afectación a los
vasos sanguíneos que van a la retina. Es posible que al inicio no presente
síntomas, pero si se complica puede provocar ceguera. Los enfermos de diabetes tipo 1 o tipo 2 están expuestos a
esta enfermedad.
Causas de la retinopatía
diabética
La presencia de azúcar por
encima de los límites normales y durante mucho tiempo obstruye los vasos
sanguíneos que van a la retina y reducen la llegada de la sangre. Entonces, el
ojo genera otros vasos sanguíneos, pero no se desarrollan de forma adecuada y
causan sangrados.
Hay dos clases de
retinopatía diabética. La precoz, también llamada retinopatía diabética no
proliferativa, se caracteriza porque los vasos sanguíneos nuevos no proliferan
y no se desarrollan adecuadamente. Es la más frecuente. La avanzada o
retinopatía diabética proliferativa consiste en que los vasos sanguíneos
dañados se cierran y crecen nuevos vasos sanguíneos anormales en la retina.
Los diabéticos están muy
expuestos a esta enfermedad. Y más todavía si tienen colesterol alto, presión
arterial alta o son fumadores. El riesgo también aumenta durante el embarazo.
Los riesgos principales de la enfermedad, si se complica, son el desprendimiento de retina, glaucoma o incluso la
pérdida de visión.
Tipos de retinopatía
diabética:
- Retinopatía no proliferativa. La enfermedad se limita a
la retina. Es la etapa temprana del trastorno visual.
- Retinopatía diabética proliferativa. Es la fase más avanzada
de la enfermedad que se extiende más allá de la retina con crecimiento de
nuevos pequeños vasos sanguíneos anómalos. Puede haber edema macular diabético con acumulación de
líquido en la zona central de la retina.
Síntomas de la retinopatía diabétic
Al principio no suelen aparecer síntomas. Cuando la enfermedad avanza, pueden manifestarse signos como:
- Visión borrosa o fluctuante
- Pérdida gradual de la vista
- Mala visión nocturna
- Dificultad para percibir colores
- Manchas en el campo visual o “moscas volantes” oscuras
- Cierta pérdida de visión en ambos ojos
- Ver objetos deformados
Diagnóstico de la retinopatía diabética
El oftalmólogo debe
realizar un examen ocular con la pupila dilatada. Durante el examen podría ver
si hay vasos sanguíneos alterados y si están creciendo vasos sanguíneos nuevos.
También comprobará si hay desprendimiento de retina. También medirá la presión
ocular. Finalmente puede necesitar la realización de una angiografía y de una
tomografía.
Tratamiento de la retinopatía diabética
El tratamiento busca frenar
el avance de la enfermedad y dependería del nivel de afectación de cada
paciente. Si la retinopatía diabética está en la etapa inicial (retinopatía
diabética no proliferativa de leve a moderada) incluso es posible que no se
requiera tratamiento, pero será necesario hacer controles a menudo. Si el
enfermo está ya en fase de retinopatía diabética proliferativa será
imprescindible una intervención quirúrgica mediante una vitrectomía.