Las enfermedades cardiovasculares son
la primera causa de muerte en Europa (el 30 % del total) por delante de tumores
y enfermedades respiratorias, también del mundo con más de 17
millones de fallecimientos anuales y se prevé que vayan en aumento, con lo que
expertos y pacientes inciden en la prevención.
Nosotros mismos podemos influir en los
factores de riesgo implicados, entre ellos, el tabaquismo, el sedentarismo, la
mala alimentación, la obesidad, la hipertensión, el estrés y otros causantes.
Seguir una dieta más sana, dejar
el tabaco, hacer ejercicio o relajarse puede contribuir a evitar padecer
problemas cardíacos en un futuro. Por ello te presentamos 4 consejos que
te ayudaran a cuidarte.
1. Comer sano
Verduras al vapor
Una de las grandes ventajas de cocinar al vapor es
que el resultado es muchísimo más saludable por diversos motivos. Por un lado,
al no estar fritos, horneados, ni cocidos, los alimentos mantienen mucho mejor
sus propiedades, aportando a nuestro organismo todas las bondades que alberga
su composición.
Consumir más fruta
La fruta es necesaria a lo largo de
todo el año. Se recomienda consumir un mínimo de tres piezas al día,
preferentemente frescas. Las frutas de invierno son los cítricos, muy ricos en
vitamina C, como la naranja, la mandarina, el limón y el pomelo.
2. Dejar de fumar
Es bueno que afrontes este proceso
siendo conscientes de las dificultades que implica, pero con el convencimiento
de que es posible conseguirlo. No hay nadie que se haya arrepentido de dejar de
fumar y sí muchas personas que se han arrepentido de no hacerlo.
3. Hacer ejercicio
En invierno la falta de luz solar
afecta el estado de ánimo de las personas. La mejor manera de contrarrestar
este efecto es hacer actividad física, porque es un buen remedio contra la
tristeza, la ansiedad y la depresión. No hay que hacer treinta minutos seguidos,
se puede llegar sumando períodos de diez minutos. En cuanto a los niños y
adolescentes, necesitan sesenta minutos diarios de actividad física.
4. Relajación
Es muy importante buscar momentos para
despejar la mente y quitarte el estrés de encima. Antes de irte a dormir puede
ser un buen momento para desconectarte. La meditación, ejercicios de
respiración, yoga entre otros, son algunas de las herramientas que te puede
ayudar a contrarrestar el cansancio.