La nueva tendencia del reducetarianismo, donde las personas reducen el consumo de carne pero no por completo, lo que se conocía como vegetarianos flexibles que de vez en cuando pueden hacer una probadita a una proteína animal, ahora lo hacen con una motivación ecológica.
Reduciendo de forma gradual el consumo de carne
El reducetarianismo es un movimiento que surge de mejorar la salud del ser humano, proteger el medio ambiente y evitar el sufrimiento de los animales de las granjas. A diferencia de los flexitarianos, estos reducen su consumo atendiendo de forma gradual tomando en cuenta sus propias dietas.
Adoptar esta dieta trae sus beneficios saludables como:
- Disminuye las probabilidades de padecer diabetes tipo 2
- Mantiene a la persona en forma. El consumo diario de carne hace que la persona esta propensa a ganar más peso que la que no
- Disminuye las probabilidades de aparecer cardiopatías, en cuanto a la carne roja estimula la formación de placas en las arterias.
Según la Asociación Americana del Corazón, consumir menos carne roja, disminuye considerablemente las posibilidades de sufrir un ataque al corazón. Además, los animales frecuentemente son afectados por bacterias y enfermedades, debido a las precarias condiciones en que viven en las granjas.
El 80% de los antibióticos vendidos en los Estados Unidos, son suministrados a los animales para reemplazar condiciones saludables, de esta forma reciben el medicamento sin estar enfermos.
Los antibióticos sustituyen las dietas saludables de los animales, al ser suministrados sin ningún padecimiento, crean resistencia a las bacterias que pueden ser traspasados a los humanos cuando las consumen.
En el 2015, la OMS colocó a las carnes procesadas como las primeras de las cinco categorías en las que contiene posibles agentes cancerígenos, junto al tabaco y asbesto. Por otra parte las carnes rojas fueron colocadas en la segunda categoría de sustancias potencialmente cancerígenas, la evidencia aún sigue siendo limitada.
La Solución reducetariana
Lo que comenzó como un debate en un almuerzo entre amigos, terminó en un movimiento que no solo acoge a los que reducen el consumo de carne considerablemente de su dieta diaria y actúes en consecuencia. También, se plantea el movimiento como una solución alternativa a los problemas ecológicos y a las objeciones éticas sobre el bienestar de los animales en la industria de la carne.
Actualmente, existe la tendencia de reducir el consumo de carne de forma inconsciente, impulsados por la constante promoción de aumentar el consumo de frutas y vegetales frescos.
Estudios recientes publicados en la revista científica Science, la medida más eficaz para reducir el impacto de la degradación del ecosistema terrestre y acuáticos, es reducir el consumo de la carne.
El grupo propone cumplir el reto de los 30 días, promovido por el #LessMeat creador por los fundadores Brian Kateman (CEO) y Tyler Alterman, para promover el reducetarianismo y compartir de una forma global las experiencias de reducir el consumo de carne.