En principio los pies no tienen por qué oler mal si se mantienen limpios y sanos. Pero, es totalmente cierto que muchos pies huelen mal o muy mal. Un estudio realizado por la Universidad de Barcelona reveló que estos olores en ocasiones pueden ser producidos por algunos cambios hormonales, el estrés, la alimentación o la presencia de hongos o de humedad, lo cual hace que se activen unas glándulas que hay en ellos y que se llaman glándulas ecrinas y aprocrinas . Estas glándulas ecrinas y aprocrinas se tratan de glándulas sudoríparas , es decir, poros por los que el sudor sale al exterior. Las mismas están en la piel de todo el cuerpo, no solo en los pies. El líquido que segregan, el sudor, no huele mal, es inodoro, y está formado por proteínas, ácidos grasos y esteroides. Además, nuestra piel está totalmente cubierta por bacterias. Y esas bacterias se alimentan de este líquido, de esas proteínas, ácidos grasos y esteroides. Al consumir este ...